Colorful: 3 VERDE

El complejo de biología y botánica completó el inventario.
Los investigadores enviaron los resultados con los robots. La central aguardaba por la señal de la base principal.
Helena observaba a Ian, mientras éste trazaba las indicaciones de riego en las instalaciones. El asistente se percató, con cierto nerviosismo, de la mirada penetrante de su jefa.

-          ¿Necesita algo, doctora? –ella negó indiferente- Bien… ¿Le molestaría dejar de mirarme? –asintió- Ya veo… -regresó sus ojos al panel de control.
-          ¡Helena! –ella no se inmutó- ¿Tienes los resultados de la prueba?
-          Ian está ingresando los datos de…
-          Oye, estoy hablando del experimento, no de tu asistente… -irritado.
-          En un momento le entrego el folio, doctor Green –Ian se adelantó.

Aaron Green tomó asiento frente a su prima. Agitó la mano delante de su rostro, insistente. Ésta chasqueó la lengua con fastidio y retiró su mano, frunciendo el ceño.

-          Le informamos al staff, que las instalaciones sellarán sus entradas en media hora. Repetimos. En media hora, toda salida quedará sellada. De no contar con un pase verde, se procederá al despido inmediato. Agradecemos su atención.
-          ¿Escuchaste? –Aaron agita la cabeza, desaprobatorio- Hoy salí tan apresurado del apartamento, que olvidé mi pase.

Tanto Helena como Ian dejaron de hacer sus cosas y lo miraron, alarmados. Aaron se encogió de hombros.

-          Mi nombre aparece en la lista y tengo mi carné –se los muestra- No creo que me hagan problema.
-          Debes irte de inmediato, Aaron.
-          …qué dices… -ríe contrariado.
-          Doctor Green –mira al asistente-, sin el pase, da igual que su nombre esté en la lista, ellos lo van a sacar.
-          Es… ¡Esperen! –se pone en pie- No estarán hablando en serio, ¿o sí? –Ian asintió.
-          Sí que eres tonto, Aaron –resopla, Helena.

Las puertas del laboratorio se abrieron. Un par de militares mostraron su identificación y pasaron. Helena e Ian se acercaron y deslizaron sus pases en la máquina. Aaron estaba quieto. El par de uniformados giraron hacia él y le indicaron que sacara su pase.

-          Lo olvidé en casa…
-          Deberá acompañarnos, doctor Green.
-          Están cometiendo un error…
-          Acompáñenos o será llevado a la fuerza –Uno sacó unas esposas y el otro preparó su arma.
-          …qué demonios…

Aaron dejó sus cosas con Helena y se retiró. Ian se puso aún más nervioso.

-          ¿Cree que lo vayan a lastimar, doctora Green?
-          Lo dudo –regresó a su escritorio- Si saben quién es mi primo, dudo que si quiera lo saquen de las instalaciones.

Ian terminó de organizar su trabajo.
Diez minutos después, el contador se lanzó. Los indicadores de desconexión se encendieron. Ambos apagaron todo dispositivo electrónico en el laboratorio. Aseguraron los cultivos.
Helena tomó la muñeca de su asistente y lo llevó hasta el sofá. Lo sentó e hizo mismo. Palmeó su mano y giró hacia el observador.

-          Es difícil de creer, ¿no?
-          …sí… ¿Estarán seguros?

Helena suspiró con cansancio y se recostó en el hombro del menor. Cerró los ojos y sonrió.
Ian entrecerró los ojos, a medida que una luz cegadora inundaba las instalaciones del gran complejo de biología y botánica.


- o -

Bueno, ése fue el capítulo tres.
Espero lo hayan disfrutado.
No se olviden de comentar. Gracias.

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